La lactancia es una de las etapas más desafiantes y al mismo tiempo, más lindas, del postparto. En Madremía, sabemos que cada experiencia es única, por eso queremos acompañarte con estos consejos prácticos y reales que te ayudarán a vivir esta etapa con más seguridad y libertad.
1. Ten siempre una reserva de leche en el congelador
Aunque suene exagerado al principio, tener un mini stock de leche guardado puede darte tranquilidad para cuando necesites salir, descansar o si pasa cualquier cosa. No necesitas extraer grandes cantidades; cada gota cuenta. Aunque sean solo 10 ml, irán sumando con el tiempo y te permitirán crear una reserva que puede marcar la diferencia en tu tranquilidad. Puedes comenzar extrayendo pequeñas cantidades al día, especialmente después de las tomas de la mañana, y almacenarlas en bolsas especiales con fecha y hora. Para hacerlo, cuando termines la toma de tu guagua, ponte el extractor unos minutos y guarda esa leche. Tener esa leche a mano puede hacerte sentir más libre y menos presionada, lo que a la vez mejorará tu lactancia (estar más relax es clave).
2. Antes de tu primera salida sin tu guagua, haz que pruebe una mamadera
Sabemos que salir por primera vez sin tu guagua puede generar ansiedad. Una buena manera de prepararte es hacer que pruebe una mamadera antes de esa primera salida. No se trata de dejar de amamantar, sino de asegurarte que si llegara a necesitar una toma mientras tú no estás, pueda aceptarla sin problema. Prueba con leche que hayas extraído previamente, idealmente ofrecida por otra persona en un ambiente tranquilo. Este gesto simple puede evitar un mal rato tanto para tu guagua como para quien lo cuide mientras estás fuera.
3. Si te duele, algo estás haciendo mal: busca apoyo profesional
El dolor prolongado durante la lactancia no es normal ni algo que tengas que aguantar. Si sientes molestias persistentes, grietas, o dolor al amamantar, es importante pedir ayuda. Una asesora de lactancia puede guiarte sobre agarre, posición y evaluación de tu guagua. Muchas veces, un pequeño ajuste hace una gran diferencia. Invertir en una sesión con una profesional en lactancia puede cambiar por completo tu experiencia y ayudarte a disfrutar este proceso de forma más cómoda y segura. Es, sin duda, una de las mejores inversiones que puedes hacer para ti y para tu guagua.
4. Usa poleras de lactancia: te facilitarán la vida
No es solo una cuestión de estilo, es una cuestión de comodidad. Las poleras de lactancia están diseñadas con aperturas discretas que permiten dar papa en cualquier lugar sin exponer de más tu cuerpo ni complicarte con capas de ropa. Son ideales para salidas, visitas o simplemente para estar en tu casa y sentirte preparada en todo minuto. En Madremía diseñamos prendas lindas, funcionales y pensadas para que te sientas bien y libre de moverte con tu guagua a todas partes.
Puedes revisar aquí nuestros modelos.
BONUS TRACK: La mejor lactancia es como a ti te resulte mejor
En un mundo lleno de opiniones e información, recordártelo FUNDAMENTAL: la mejor lactancia es la que a ti te funcione. Si das pechuga a libre demanda, con horarios, mixto, exclusiva o solo por un tiempo, está perfecto. Tu salud mental, tu bienestar y el de tu guagua están primero. No hay una forma correcta. Escúchate, infórmate, y toma decisiones desde el amor (propio también) y la conciencia.
En Madremía creemos en acompañarte sin juicios, porque cada maternidad es distinta y todas son igual de válidas.